¿Quién será el quinto sol? Se preguntaron los dioses en Teotihuacán. El dios rico tuvo miedo ante el bracero, Teotexcalli. Nanahuatzin, el desvalido, cerró los ojos y saltó.
Una de las cartas más utilizadas en los mazos de Primera Era. Muy rápido, ya que por 1 oro tienes un aliado de fuerza 4, y además Imbloqueable.
Nanahuatzin está orientado a mazos de juego rápido. Su bajo coste y gran fuerza (para los estándares de ese entonces) fueron muy cotizados, siendo la 9º carta más valorada por los jugadores de Primera Era según el Álbum Guía Mitos y Leyendas 2003. Además, resultaba útil para cartas con bonificadores por Cementerio y su habilidad de imbloqueable, rara en esos años, lo hacía adaptable a casi cualquier estrategia.
Mitología[]
Nanahuatzin es un dios de bajo rango en el panteón azteca, que se sacrificó a sí mismo para convertirse en el dios Sol Tonatiuh.
Antes de que hubiese día, se reunieron los dioses en Teotihuacan y dijeron, “¿Quién alumbrará el mundo?” Un dios rico, Tecuzitecatl, dijo “yo tomo el cargo de alumbrar el mundo". "¿Quién será el otro?", y como nadie respondía, se lo ordenaron a otro dios que era pobre, Nanahuatzin. Luego encendieron fuego y ordenaron al dios rico que se metiera dentro. Pero tuvo miedo. Entonces le tocó el turno a Nanauatzin que cerró los ojos, se metió en el fuego y ardió, para luego emerger como el Sol.